GUÍA SOBRE COMO ENSEÑAR AL PERRO A HACER SUS NECESIDADES FUERA DE CASA

GUÍA SOBRE COMO ENSEÑAR AL PERRO A HACER SUS NECESIDADES FUERA DE CASA

Como enseñar a perro a hacer sus necesidades fuera

Enseñar a un cachorro a hacer sus necesidades fuera de casa es uno de los primeros pasos para la educación del perro. 

¿Cómo evitar accidentes desagradables y enseñar al perro a hacer sus necesidades fuera de casa? Aquí están algunos consejos útiles y eficaces para poner en práctica en cuanto el perro entre a formar parte de vuestra familia. 

LAS NECESIDADES Y LA RUTINA DEL CACHORRO 

El primer aspecto a tener en cuenta para enseñar al perro a hacer sus necesidades fuera de la vivienda es entender que un perro, sobre todo si es cachorro, necesitará salidas más frecuentes con respecto a las que requiere un perro adulto. 

Un poco como ocurre con los niños, los perros jóvenes tienen la misma exigencia de expulsar sus necesidades con mayor frecuencia. Esta consideración nos ayuda a entender por qué es útil introducir una rutina en la vida del perro, acostumbrándolo a ritmos regulares.

Suministrar la comida siempre en los mismos horarios, sacarlo afuera o dejar que juegue en momentos precisos del día, le ayudará a entender cuáles son los ritmos y le será más simple introducir en este esquema también los espacios dedicados a las necesidades. 

Puede ser muy útil sacar al perro en momentos específicos, por ejemplo después de la comida, antes de dormir o cuando se acaba de despertar. 

¿REFUERZOS POSITIVOS O REGAÑOS? 

Muchos habrán escuchado decir que para enseñar a un cachorro a hacer sus necesidades fuera de la casa es útil regañarlo en cuanto orine dentro del hogar, quizás haciéndole oler sus necesidades. Sin embargo, castigar o regañar al perro es muy desaconsejable: el cachorro podría interpretar el reproche como un gesto contrario a su necesidad física y no, por ejemplo, al lugar donde hizo sus necesidades. 

Además, podría desarrollar una sensación de miedo y de ansiedad hacia la persona que, por tanto, obtendría el objetivo contrario al deseado.

En cambio, son definitivamente aconsejados los refuerzos positivos, es decir, los premios o las actitudes favorables hacia el perro cada vez que se porta como nos gustaría. Por lo que se refiere a las necesidades, podríamos premiarlo con un poco de comida o con una caricia, quizás animándolo siempre con la misma palabra o con una frase breve.

Es útil también insertar en la frase breve el nombre del perro, que iría siempre en primer lugar, para que entienda que nos estamos refiriendo a él. 

EMPAPADORES, TIEMPO E PACIENCIA

Para ayudar al perro a entender donde puede ensuciar puede ser útil usar los empapadores. En este caso el paño absorbente se deberá colocar siempre en el mismo lugar y podrá utilizarse para posicionar al perro en caso de darse cuenta de que está a punto de expulsar sus necesidades en el suelo o en otro lugar. 

Si el perro va solo al empapador deberá premiárseleo animarle, como ya hemos dicho antes. De esta manera entenderá que la actitud ha sido apreciada por el dueño y tenderá a repetirla.

En un segundo momento, se podrá alejar el empapador moviéndolo progresivamente hacia la puerta de entrada o hacia una salida a un jardín o a un espacio abierto donde el perro tenga acceso. Así será más simple explicar a “Lilly” o a “Taco” que el lugar para las necesidades está fuera de la casa. 

El proceso de aprendizaje podría requerir un poco de tiempo: sin embargo, solo así será más simple para el perro aprender esto (y otros) comportamientos que les iremos enseñando. 

SI EL PERRO NO ESTÁ VACUNADO 

Si el cacorro no estuviera todavía vacunado, aconsejamos llevarlo afuera solo en zonas seguras desde el punto de vista higiénico, y evitar el contacto con otros perros o con zonas frecuentadas por otros animales.

Esto es necesario para evitar que pueda desarrollar infecciones o enfermedades; podría ser útil permitirle salir en una zona que frecuente solo él, como por ejemplo un lugar en el jardín o en un balcón. 

De esta manera conseguirá aprender de todas formas el concepto de salida sin, no obstante, entrar en contacto con potenciales riesgos para su salud.

Enseñar a un perro a ensuciar fuera de casa es una operación que necesitará constancia y paciencia, pero que resultará eficaz, siempre que estemos dispuestos a seguir algunas precauciones y a dedicar el tiempo que el perro necesite para que aprenda las actitudes que queremos que adopte.

No olvidemos que algún accidente siempre podrá ocurrir: por eso es aconsejable no dejar nunca al perro solo durante demasiado tiempo, sobre todo en la fase de aprendizaje de los comportamientos. 

Los perros pueden aprender rápido a ensuciar fuera de casa, siempre que estemos dispuestos a dedicarles tiempo para la enseñanza y a seguir algunos simples consejos.